jueves, 21 de junio de 2018

Roban y queman camioneta de una empresa panificadora


Omealca, Ver.- Una camioneta de una empresa panificadora fue encontrada calcinada, abandonada en medio de unos matorrales entre las comunidades de Dos Caminos y Loma Mulato después de ser robada por asalto por sujetos armados que interceptaron al chofer en el camino y lo mantuvieron cautivo.

Los delincuentes obligaron al empleado a tomar por una brecha e internarse al monte donde lo retuvieron una media hora y después lo dejaron ir tras despojarlo de dinero en efectivo y documentos personales.

Los maleantes destrozaron la caja se seguridad con un soplete y después la calcinaron para no dejar evidencias.

Apoderados legales de la empresa denunciarían durante la tarde-noche de ayer el asalto, robo y destrucción de la camioneta en la fiscalía regional contra quien o quienes resulten responsables.

El asalto ocurrió alrededor de la una de la tarde de ayer cuando Silverio S. conducía una camioneta Nissan NP300, placas XF-1697-A, número económico 48807 de la empresa panificadora de Matatenatito a Dos Caminos, por la zona del llano.

En el camino fue interceptado por tres individuos que salieron del monte, armados con pistola y escopeta y entre gritos indicaron que se trataba de un asalto y lo obligaron a detenerse.

Pistola en mano, uno de los sujetos, abordó la camioneta y ordenó a la víctima meterse a un camino vecinal y seguir hasta el lindero con Tierra Blanca.

Allí lo bajaron de la camioneta, lo tiraron al piso mientras otros individuos, destrozaron la caja de seguridad con un soplete y cargaron con el dinero y la mercancía por un monto estimado en $9 mil.

El chofer fue despojado de documentos personales, dinero en efectivo y el teléfono celular. Esa misma noche, la víctima quedó abandonada en el monte y al sentirse a salvo, caminó hasta la gasolinera de Dos Caminos, reportó el asalto a sus superiores y no fue sino hasta ayer cuando hablaron con las autoridades para reportar el hurto.

La camioneta fue encontrada completamente calcinada en medio de unos matorrales y entregada a apoderados legales de la empresa para mostrarla a la compañía afianzadora y justificar el robo.

Fuente: El Sol de Córdoba 

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