A través de una solicitud de transparencia, la paraestatal reveló que para frenar la incidencia del delito, aumentó la vigilancia en zona consideradas focos rojos en Veracruz y fortaleció la colaboración con la Procuraduría General de la República, la Policía Federal y la Secretaría de Gobernación, para apoyar labores de investigación enfocadas al robo y comercio ilegal de combustibles.
Sin embargo los esfuerzos han dado escasos resultados, el documento oficial revela que la cifras de robo de combustible se han duplicado cada año, en 2014 fueron 229 tomas, para 2015 se reportaron 339, el 2016 tuvo 668 tomas, cifra que creció para el cierre del 2018.
El cambio de administración estatal, aumentó el delito en las principales regiones por donde atraviesan ductos, así registró 1 mil 102 tomas.
Fuente: Formato Siete
No hay comentarios.:
Publicar un comentario